Querida lectora:
Quizás ya te suene lo que te voy a contar a continuación.
Conoces a un hombre, pasas un tiempo agradable con él y se inicia una relación seria entre
vosotros. Tienes la sensación de que esta relación tiene vistas de un futuro juntos. De repente, de
un día para otro, se comporta de un modo “raro”.
Ya casi no te llama y comenta que “necesita tiempo”, que simplemente no quiere atarse todavía
a nada.
Y esto sin ningún tipo de razón lógica o causa obvia.
Nos encontramos aquí con un "caso clásico". No te creerías la de veces que he escuchado
tal historia u otras similares.
“Es que simplemente no sabe lo que quiere...”
Pasa diariamente, cientos de veces: un hombre está enrollado con una mujer y parece que realmente
tiene sentimientos verdaderos hacia ella. La llama varias veces al día, es un caramelito, le dice
“cariño”; sin embargo unos días más tarde se comporta como si ya no le
interesara absolutamente nada, como si se hubiera olvidado de todo lo dicho y vivido juntos.
Desconcertante, ¿no? Sin mencionar que tal montaña rusa de sentimientos es simplemente AGOTADORA.
Para traer un poquito de luz a la oscuridad, me gustaría explicarte con este artículo lo que a
un hombre se le pasa por la cabeza cuando “no sabe lo que quiere”:
Él claro que siente algo por ti. Justo en los días en los que se siente un poco solo, realmente te
añora y además te lo demuestra. Los hombres también necesitan la vida en pareja al igual
que las mujeres. Con ello pueden dar credibilidad a su romanticismo incipiente.
Pero:
Cuando él se pone a pensar detenidamente, lo que ocurre ahí es lo siguiente:
Por supuesto él siente algo por ti, pero también piensa al mismo tiempo:
“Ella no es LA MUJER indicada para mí. Ella no es con la que me gustaría pasar el resto de
mi vida".
Él piensa que algún día encontrará a "una mejor“. Para que no surja en ti
la esperanza de un futuro en común, él se aleja de nuevo emocionalmente de ti.
Ésta es la forma masculina de no querer hacer demasiado daño a una mujer. Él se justifica a
sí mismo diciendo: “Yo nunca le he dado a entender que estaríamos juntos en el futuro, por
lo que tampoco soy responsable de cómo lo pase ahora“.
Ya sé que es injusto, pero lamentablemente así es la cruda realidad a veces…
Él se encuentra en el dilema de que por una parte no te quiere perder (él sabe perfectamente que
una mujer como tú no se encuentra a la vuelta de la esquina), y al mismo tiempo tiene el ideal de su
mujer perfecta en la cabeza. Así es de duro:
Él NO te ve como a su mujer ideal.
Todavía no...
No obstante, esto puede cambiar.
Y es cuando te preguntas qué es lo que activa el sentimiento en un hombre de: “Sí, ella es
LA mujer, la perfecta para mí”; ¿qué es lo que lleva a un hombre a engancharse
permanentemente de ti?
Primeramente quiero explicarte lo que NO activa este sentimiento en los hombres:
-
Intentas convencerle de que tú eres LA mujer perfecta para él. “¡No
encontrarás a una mujer mejor que yo!” ¿No te das cuenta de lo bien que congeniamos?"
Los sentimientos no nacen por los “trabajos de convencimiento”.
-
Eres siempre la mujer amable y comprensiva que le da toda la libertad del mundo. Solo quedas con
él cuando a él le viene bien. Tú simplemente estás intentando NO
presionarlo. Esto es muy cómodo para él, pero entonces él solo te ve simplemente
como la “mujer según demanda”
-
O haces lo contrario, le presionas demasiado. Le das un ultimátum para que se decida por ti o no.
Las emociones no se exprimen, los sentimientos nacen siempre involuntariamente.
-
Comparas sus sentimientos con los TUYOS. Hablas “de lo mucho que le quieres” y lo importante
que él es para ti. Ello por supuesto le halaga, pero SUS sentimientos no cambian mucho.
Este clásico “error” NO activa por supuesto el sentimiento en los hombres de:
“¡No quiero pederla, me gustaría pasar el resto de mi vida con ella!”
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Estoy seguro de que después de saber esto, tu vida sentimental no será tan complicada.
Tu amigo Christian Sander
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